03.10.13
Celebrada la VI edición del Cuéntame historias sobre ruedas
Organizado por el Moto Club Las Palmas Roque Nublo, coincidió con las Jornadas de Patrimonio de Automoción y se entregaron 150 placas conmemorativas.
La explosión de luz en el cielo de Artenara, convirtió un fin de semana para las familias y amantes de lo clásico, en el mejor escenario de altura para esta cita de Gran Canaria. Días de sol radiante, noches serenas de estrellas, con un mar de nubes abajo en los barrancos de Coruña y el valle. Con el pico Teide como testigo inamovible de otro inolvidable encuentro.
El sábado 28 de Septiembre comenzó con el Rallye Turístico, que a falta de consolidación definitiva apunta buenas perspectivas. Pocos coches, más bien despistados de la cita, y una cuarentena larga de motos clásicas, hicieron la caravana hasta Tunte. Antes, visitando al majestuoso Roque Bentaiga para la foto Oficial del día.
Por la tarde, llegaron más amigos de lo clásico, cuatro furgonetas T1 Inmaculadas con una zaranda de Hippy, que aparecieron disfrazados para la fiesta y la acampada. Guitarras y buena música la de aquellos años. La sala de proyecciones estaba a tope, la expectación creada con imágenes inéditas en superocho. Una vez más, Pepe A. Monzón esgrimió su cultivo. Ahora está inmerso preparando con el mismo entusiasmo el libro de los coches. Desde 1954 a 1967 con explicaciones puntuales. Pero aquellas carreras del Kilómetro lanzado de San Cristóbal, de las subidas a Tafira, de los Rallies de Gran Canaria, la Carrera de Mesa y López nos dejaron con un sabor de documento histórico increíble. Reparto de placas a los diferentes clubes y colectivos. Y Cena para todos, en un generoso alarde convicción y respaldo del municipio.
La noche dio para mucho, fue larga y amenizada con Ronda. Ahora quedaron los auténticos Viejas glorias del "Cuéntame", aquellos que se relajan a la lumbre de una hoguera y al sonido de unas cuerdas. Que noche la de aquel año, Clásicos a rabiar, Lorenzo Santamaría, los Chichos, Los Bravos, Elvis, Dúo Dinámico, un lote especial de concierto en la voz y el equilibrio de las guitarras.
El domingo, en el interior de la Carpa, el orden del concierto, en el montaje de mercadillo, de coches alineados de motos en formación, un triciclo medio chino, medio canarión, levantó las primeras sonrisas de expectación de los cachivaches. Toda la armonía sin descuentos. Cierto es que se echó en falta más vehículos antiguos, más variedad de marcas. Pero era lo menos importante, había suficientes y los amigos motorizados, que nunca fallan, estuvieron ahí llegando hasta llenar el adoquinado, los puestos de mercadeo hicieron las delicias de las miradas y la búsqueda, una nota alta por su consolidación, habrá más tiempo de crecer y definir.
El Cuéntame historias sobre ruedas, tiene esa dosis de magia que emana de la naturaleza con que se sienten las cosas que nos gustan. La sonrisa en el público, la hospitalidad de Artenara y su ayuntamiento, que aportó con el corazón lo que pudo que fue mucho.
